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Cómo se ve la Situación de las Pymes en México?

Las PyMEs en sus tres sectores, comercio, servicios e industria, son negocio de un solo hombre: administrador, técnico, comercializador, financiero y fiscalista, por consiguiente, enfrentan una serie de problemas —laborales, fiscales, financieros y de regulación— que frenan su desarrollo dejándolas indefensas ante la competencia nacional, al hacerle frente a las grandes firmas, e internacional, representada por las grandes compañías transnacionales e incluso PyMEs extrajeras que cuentan con apoyos y rutas gubernamentales para su desarrollo.



Tomando en cuenta una base de 4 millones de empresas micro, pequeñas y medianas de los sectores industrial, comercio y servicios, encontramos que:

  • El 65% de las pymes en México son de carácter familiar,    
  • Más de 80% no cuenta con algún tipo de certificación;    
  • Cerca de 50% no utiliza  técnicas en calidad o productividad;    
  • Sólo 24 % maneja alguna licencia o patente    
  • El 83% no realiza actividad alguna para consolidar su presencia en el exterior.    
  • Dentro del sector manufacturero se destaca que el 35% de los negocios no realizó ninguna inversión.

La PYMES al tener una estructura organizacional endeble carecen de puestos definidos y de procedimientos de operación; no planean sino que son entidades reactivas al entorno y seguidoras de los líderes de su industria; la capacidad de administrar, supervisar y controlar es muy restringida. Paralelamente, sus condiciones administrativas no les dan solidez financiera y no son sujetos de crédito de forma expedita y accesible. El crédito disponible para estas empresas es escaso y caro, casi inalcanzable por su costo y garantías.

Pero en México, ante la falta de trabajo remunerado, las micros están convirtiéndose en una alternativa de autoempelo para la población, si las vemos como un paliativo, soluciones temporales, y no como opciones reales para generar empleo y desarrollo económico, será muy difícil que la situación actual se pueda revertir en el corto o mediano plazo.

Pese a los esfuerzos que se hacen, por parte del gobierno y de las propias empresas, la información disponible indica que las PyMEs atraviesan por un mal momento que queda registrado tanto en decrecimiento en la producción como en su desenvolvimiento dentro de los mercados, por lo tanto, se deben seguir consolidando los apoyos, especificándose y destinándose de acuerdo a las problemáticas y planes particulares de cada sector y dentro de éste de cada división, dirigidos al fortalecimiento de cadenas productivas y modernización tecnológica, así como a capacitación básica y especializada, tomando en cuenta la problemática del tipo de empresas mexicanas que en su mayoría son de carácter familiar.

Además, se debe caminar hacia una política económica e industrial que dé certidumbre y genere confianza entre los casi 4 millones de pequeños y medianos empresarios del país, porque, a decir de un gran número de éstos, ¿de qué sirven  los programas, los apoyos y las buenas intenciones si el camino para acceder está repleto de obstáculos? Las acciones deben ser inmediatas, de lo contrario, el país se encaminará hacia una economía de subsistencia generadora de autoempleo, lo cual no lleva consigo un desarrollo empresarial para generar una estructura sólida de empresas, se convierte tan sólo en un paliativo ante la falta de generación de empleo.

Luis Dávila
Director General
X-PANDE

Tel. 5563.3893
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